Vivimos en una época en la que somos testigos de que las relaciones familiares resultan sofocadas de diferentes formas. Muchos padres, por ejemplo, no tienen tiempo para los hijos, debido al exceso de trabajo y viajes, y muchos hijos no tienen tiempo para los padres, debido a los compromisos académicos, extracurriculares y su red de amigos en Internet. En la actualidad, hay muchas cosas que tienden a generar daños a toda la familia. Una de ellas es la pornografía, que con el avance de la tecnología de hace cada vez más accesible.
En un estudio realizado por Manning (2006) y citado por Lopes (2013), el autor relató algunos de los efectos de consumo de pornografía para la familia. A continuación, mencionamos algunos de estos efectos:
Efectos a nivel individual
- Desvalorización del matrimonio, de la monogamia y la paternidad
- Aumento de la agresividad y banalización de las agresiones sexuales
Efectos a nivel conyugal
- Inestabilidad emocional y relacional;
- Disminución de la satisfacción sexual y de la intimidad sexual entre el matrimonio;
- Percepción del consumo de pornografía como un acto de traición;
Efectos en niños y adolescentes (cuando uno de los padres consume pornografía)
- Acceso facilitado al material pornográfico, con posibilidad de efectos traumáticos;
- Impacto emocional negativo;
- Perjuicios al desarrollo social y sexual del niño y el adolescente, en caso de que tengan acceso a los contenidos consumidos por el adulto;
Cada uno de estos perjuicios es motivo de preocupación. No podemos cerrar los ojos a la gravedad del tema. ¡Rompamos el silencio en favor de las familias!
Referencia:
LOPES, A.S.S.P. Consumo de Pornografía en Internet, Evaluación de las actitudes frente a la sexualidad y creencias sobre la violencia sexual. 2013. Disertación (Maestría en Psicología Clínica y se orientación) – Departamento de Psicología y Sociología, Universidad Autónoma de Lisboa, Lisboa, 2013.